
FRACASO ESCOLAR
Las dos palabras temidas por todos los padres de adolescentes (principalmente). Sobretodo cuando llega el primer suspenso, los deberes no presentados o el trabajo copiado de internet. Es entonces cuando los psicólogos o psicopedagógos recibimos los casos e intentamos ayudar. En algunos casos surgen por problemas de aprendizaje, pero en otros podemos evitarlo.
El fracaso escolar se evita desde pequeños, y solo se consigue siendo conscientes de que hay que abonar bien la tierra de un futuro estudiante, acompañándole, motivándole y enseñándole a estudiar y a planificar su tiempo.
Desde inicios de primaria debemos dedicar un espacio de lectura diario. Habrá días de muchas páginas, habrá días de una y habrá días que leáis vosotros y ellos escuchen.
Anímales, potencia su autoestima como estudiante y motiva su mente a querer saber más cada día. Elogia que lo haga, que se siente a concentrarse en algo y que quiera hacer las cosas con paciencia y bien hecha.
Nadie nace sabiendo, y tus hijos tampoco. Enséñales a estudiar, a hacer un buen resumen y esquema. Y si tu no puedes, busca a alguien que pueda hacerlo. Lo agradecerá toda su vida.
Y explícale la necesidad de usar una agenda, un calendario y un horario. Que programe su tiempo de deberes y de estudio. Que sepa cuanto tiempo necesita para cada materia y cómo dividir ese tiempo para que sea lo más eficaz posible.
Todos lo deberíamos haber aprendido en algún momento. Este aprendizaje es oro. 🏅
Si ya es tarde para seguir estos consejos, o incluso siguiéndolos estás frente a un caso de fracaso escolar, contáctanos y uno de nuestros psicólogos se pondrán manos a la obras para ayudarte.